Continuando con la línea del artículo que escribí unas semanas atrás sobre los orígenes del manga en Francia, hoy voy a centrar el escrito en uno de los pilares sobre el cual todo el mercado del cómic no podría existir en ningún lugar: las editoriales. Os presentaré a varias editoriales francesas que se dedican al manga y un poco cómo comenzaron a publicarlo.

Glénat


Sin duda alguna, la que sentó precedentes en el mercado francés del cómic. Conocida en España por haber publicado aquí mangas como Naruto o Bleach, sufrió la venta cuando el editor francés principal la vendió y se convirtió en EDT. Sin embargo, en Francia su andadura ha sido bastante diferente a la española y es interesante de reseñar por la importancia dentro de la historia del manga.

Las primeras bases del manga en Francia fueron puestas precisamente por esta editorial, cuando Jacques Glénat decidió publicar Akira de Katsuhiro Otomo, aprovechando su salida al cine. Sin embargo, sólo vendió 12000 ejemplares de la tirada de 150000 que había previsto. El poco acompañamiento de ventas a las previstas se debió en gran medida a la falta del apoyo televisivo de Akira. En aquellos momentos, por muy extraño que nos pareciera tratándose de esta obra que todos los aficionados al manga conocemos, era muy importante que el manga tuviera serie de televisión para ser conocido, más que nada porque no se había creado todavía los circuitos correspondientes que retroalimentan la industria.

Su segunda tentativa dentro del mundo del cómic japonés fue muchísimos mejor y no podía ser sino con la aparición del mítico manga de Dragon Ball en los quioscos allá el 1993, que a su vez contaba con la serie en la televisión. Este manga vendió la friolera de 1,2 millones de ejemplares en el 1995, con una cifra de negocio de 50 millones de francos, lo cual supuso el 25% de los ingresos de la editorial francesa para ese año. Vamos, una barbaridad.

La política editorial de Glénat


Después de 15 años y convertida en referente del manga en Francia, con un gran volumen de negocio, ya que no en vano se trata de una de las quince editoriales francesas más importantes. Principalmente Glénat continúa buscando mantener su posición en el mercado francés a la vez que mantiene una línea coherente con la producción japonesa.

Si bien en un principio la elección del catálogo de Glénat se veía directamente relacionada con las series de animación, ahora su fondo es mucho más amplio y va más allá de dar respuesta con el manga de las series de anime. Como muchos conocéis por su filial española, Glénat tiene tres líneas principalmente para abarcar el mercado japonés de manga: verde para shōnen, rosa para shōjo y marrón para seinen. A esto hay que añadirle una colección llamada bunko para los clásicos de los años 1960 y 1970.

A pesar de ser la que más medios posee para negociar los bestsellers japoneses, después del 2004 con la fusión de las editoriales Dupuis con  Média Participations (Dargaud, Le Lombard, Kana, Lucky Comics, Blake y Mortimer, Fleurus y Mango) y la caída del peso de las ventas de manga a partir del 2008, su importancia se ha visto un tanto tocada, aunque a pesar de todo en el 2015 sigue siendo una de las editoriales más importantes del cómic en Francia.

Tonkam 

 

 La editorial Tonkam es una de las de más reconocido prestigio en Francia. La idea de crear una editorial nace de la librería Scheffer de Bastille y sobre todo, de la figura de Dominique Véret, un gran apasionado del género, y de su pareja, Sylvie Chang, hija de los propietarios de la librería Scheffer, la cual dio lugar en la década de los 90 en un lugar de importación de manga.

Es en 1994 cuando se atreven con la aventura editorial y es cuando publican Video Girl Ai de Masakazu Katusura con una tirada de la primera edición de 4000 ejemplares. Tal fue el éxito de este manga que se han vendido más de 40000 ejemplares de los 15 que tiene la edición tankoubon del manga.

En el año 2000 se marca un punto de inflexión en esta editorial, ya que Dominique Véret se hace cargo del sello Akata en colaboración con la editorial Delcourt, pero para entonces ya estaba trabajando con ellos Pascal Lafine, que se haría cargo del sello editorial.

Tonkam tiene más de 300 establecimientos en toda Francia y factura 2 millones de euros al año aproximadamente, en donde trabaja como editor, importador y distribuidor de todo lo relacionado con el mundo del cómic japonés.

La política editorial de Tonkam

 

Aparte de las consabidas distinciones entre shounen, shoujo y seinen, la editorial Tonkam tiene varios sellos que van desde el humor, la filosfía, el deporte, hasta la colección tsuki que acoge a jóvenes promesas del mundo del cómic francés.

A su vez, lleva una política de autores bastante clara en donde podemos encontrar a grandes conocidos en el mundo del manga como las CLAMP, Masakazu Katsura, Yuu Watase, Kaori Yuki o Taiyo Matsumoto.

La editorial Tonkam es una editorial pequeña en la cual no trabajan más de 20 personas, por lo cual tiene una serie de recursos económicos limitados, lo cual influye principalmente en las tiradas de sus cómics, que rondan los 9000 ejemplares frente a los 30000 de otras editoriales como Glénat, y si los títulos no son rentables, no renueva los derechos de las obras.

Casterman


Casterman es una conocida editorial francesa de BD franco belga que tiene un sello de manga en colaboración con la editorial japonesa Kodansha que vio la luz en 1995. En ese momento el mercado del manga estaba pasando una crisis bastante importante y la editorial japonesa vio en la alianza con Casterman una posibilidad de intercambio de intereses bastante importante. Así en Francia se conocieron a autores como Hiroaki Samura, Kenji Tsuruta, Jiro Taniguchi o  Hideji Oda.

El objetivo de Casterman no era conseguir nuevos lectores, sino ofrecer más oferta a los clientes que ya tenía, por lo cual la temática de los mangas buscada era similar a la que podría estar ya publicando, sin embargo, esta política, un tanto audaz para el momento, fracasó ya que su público todavía no era lo suficientemente maduro (los lectores de manga eran muy jóvenes aún), mientras que los lectores de BD tenían serias reticencias a leer cómics de origen japonés. Se continuó con el intento en el 2004 con la salida de una nueva colección llamada Sakka, que se vería renacida gracias al éxito de Barrio Lejano de Taniguchi,

Interesantísimo de reseñar es quién fue el director de este sello. Frédéric Boilet, conocido como autor francés que dibujaba manga, se haría cargo de este sello y comenzaría entonces a labrar el conocido manifiesto de la nouvelle manga, de la cual ya hablaremos más adelante en otro artículo.

Asuka (Kazé manga)


Asuka es un joven editor independiente que nació en la propia casa Tonkam de mano de Raphaël Pennes, Director Comercial de Tonkam y de Dayen Renaud, uno de los principales proveedores de producto japonés para Tonkam. Debido a razones inciertas, Tonkam se desdijo de ayudar económica a la emergente Asuka, que provenía como respuesta a la caída de Daipen, una página web que vendía manga en línea, por lo cual su salida al mercado editorial se vio un tanto retrasada, cuando en 2004 podemos ver sus primeros mangas en el mercado.

Política editorial de Asuka

 

Como editora emergente sin muchos recursos económicos, Asuka no puede permitirse más que tiradas de entre 3000 y 5000 ejemplares de cada manga que publica. Importantísimo para Asuka fue la publicación de Tezuka en el llamado formato bunko (Se refiere a los tankōbon, pero publicados en el formato de las novelas ligeras japonesas y es de tamaño A6. Lo suelen llamar también bunko. Podéis leer más sobre formatos en esta entrada), que posteriormente adoptarían otras editoriales como Glénat para publicar obras de Rumiko Takahashi o de Kazuo Umezu. El tipo de manga que conforma la obra de Tezuka era ideal para este formato, ya que no se veía alterado ni en márgenes y en acabado final de la obra.

Innovadores y creativos, esta pequeña editorial francesa ha sido ampliamente copiada por otras editoriales más asentadas en el mundo, sobre todo por sus políticas de venta de DVD y su línea editorial, arriesgada y acertada en partes iguales.

Akata

 

Tal como habíamos adelantado un poco antes, el iniciador de la editorial Tonkam, Dominique Véret, había llegado a un acuerdo con la editorial Delcourt para hacerse cargo de su sello editorial de manga. Akata es una SRL, más conocida como SL (Sociedad Limitada), en donde los cuatros socios, incluído Dominique Véret, tienen una obligación para con ella.

Política editorial de Akata


El objetivo principal de Akata es tan simple como el de cualquier editorial tradicional: acercar el público lector una serie de títulos que pueden enriquecerle culturalmente sin que sean a simple vista unos best-sellers. Así pues el catálogo de Akata se compone de una amplia variedad de diferentes sellos para dar salida a títulos especializados para diferentes tipos de clientes:

- Také: para chicos jóvenes (shounen)
- Sakura: para chicas jóvenes (shoujo)
- ôbon: terror (seinen)
- Gingko: más clásicos, aunque revestidos de modernidad. (seinen)
- Fukei: Lo podríamos considerar parecido a slices of life o costumbristas. (seinen)
- Jôhin: para un público adulto femenino. (josei)

Adjuntamos para finalizar una lista de los principales editores de manga de Francia que no se han reseñado aquí para acabar de completar este artículo, aunque iremos reseñando más adelante. Debido a la evolución de sus políticas editoriales, han llegado a tener un gran peso en las ventas del manga en Francia. 

Como podéis ver el mercado francés es mucho más maduro y más amplio en cuanto a su catálogo como a su oferta editorial:

  • Kana    
  • Pika    
  • Kurokawa    
  • Ki-oon    
  • Panini    
  • Soleil Manga    
  • Ankama (Kuri)    
  • Taifu Comics    
  • Doki-Doki  

Bibliografía


Manga: http://fr.wikipedia.org/wiki/Manga (Consultada el 20/02/2015)